Bambú

El proyecto bambu

Durante más de un siglo, el único lugar en Taiwan donde se mezclaban la alta tecnología y el bambú era la escuela primaria, donde las enseñanzas del avance histórico de Thomas Alva Edison de conducir la electricidad en 1879 se pusieron en práctica utilizando un filamento de carbón hecho de esa planta. Entre tanto, en los últimos años, el Taiwan moderno se ha encontrado con menos necesidad de artículos tradicionales hechos de bambú, tales como muebles, artesanías y andamios, lo que significa que los agricultores han dependido en gran medida de los retoños y las hojas del bambú —ingredientes de cocina— para ganar dinero.
En la literatura antigua, el bambú simboliza el refinamiento y la modestia —en tanto que se dobla con la brisa, así como el “caballero intelectual” de la tradición confuciana se adapta a la compañía con la que esté— y en el pasado, el bambú aparecía en casi cada parte de la vida cotidiana taiwanesa, de los ingredientes de la cena hasta la mesa sobre la que era servida. Sin embargo, la llegada de la producción en masa cambió todo, y el problema empeoró con la mayor producción de artículos hechos con bambú en China e India.
Entre tanto, un terremoto masivo en septiembre de 1999 devastó gran parte de la producción de bambú del centro de Taiwan, mientras que la entrada de Taiwan en la Organización Mundial del Comercio en 2002 estimuló la importación de productos agrícolas, dejando al margen a muchos otros agricultores.
En julio de 2002, el Consejo de Agricultura (COA, siglas en inglés) comisionó al Instituto de Investigaciones de Tecnología Industrial (ITRI, siglas en inglés), un centro de investigación e incubación para la industria de la alta tecnología de Taiwan, para promover la tecnología del bambú y sus aplicaciones. En menos de dos años, el equipo de investigaciones de ITRI tuvo éxito en el fomento de una nueva industria con prospectos emocionantes. Básicamente, los hallazgos del equipo científico y los avances tecnológicos sugieren que, en el caso del bambú, lo que usted ve es mucho menos de lo que es posible obtener.
“Cada parte de la planta puede contribuir algo a nuestras vidas ecológica y económicamente”, dice Chen Wen-chi, director de proyecto de la División de Materiales y Diseño de Sistema de ITRI, y quien es responsable del proyecto de bambú del COA.
El proyecto bambú Un horno de barro para calentar el bambú.
Tomemos como ejemplo el bambú carbonizado de Edison. El carbón de bambú que ha sido bastante procesado a temperaturas de 1.000°C emite mucho infrarrojo, que según dicen es beneficioso para la salud. Por otra parte, cuando es calentado en agua, produce minerales tales como potasio, magnesio y hierro, que mejoran el sabor de la comida y purifican el agua al descomponer el cloro y otras impurezas.
Además, el carbón de bambú es mucho más poroso y absorbente que el carbón regular, convirtiéndolo en un filtro excelente, así como útil para modular la humedad, purificar el aire, y eliminar la electricidad estática, y también es más eficiente a la hora de preservar el calor. Aún más, como demostró Edison hace más de un siglo, el carbón de bambú puede conducir la electricidad con calor relativamente bajo, mientras que como lo indica Chen, no sólo es efectivo para proteger contra las olas electromagnéticas, sino que en la forma de fibra contiene iones negativos, que son buenos para la salud.
En pocas palabras, las posibilidades comerciales del bambú están apenas ahora volviéndose más aparentes, y entre ellas están las aplicaciones médicas. Por ejemplo, el equipo de Chen está trabajando con el Hospital de la Universidad Nacional de Taiwan en la exploración de cómo el bambú podría prolongar el efecto de las medicinas. Y, entre tanto, los avances de COA ya están logrando cambios para los taiwaneses que dependen del bambú para subsistir. Con hornos de barro, los agricultores del bambú de Taiwan pueden producir carbón de bambú de alta calidad, que las fábricas de cauce bajo pueden usar en las tecnologías de niveles más alto, desarrolladas por el equipo de Chen. El resultado es un conjunto de nuevos productos que ya han llegado al mercado, entre ellos, champú, jabón líquido para ducharse, jabones, pastas dentífricas, lociones antibacteriales, tazas, y productos para el cuidado de la piel, tales como líquidos para limpiar y proteger el rostro —todos hechos con bambú.
Chen Wen-chi: “El bambú es potencialmente un recurso sin límites”.
El proyecto bambúLa lista de productos es casi infinita si escucha a Chen. Los gránulos de carbón pueden usarse para rellenar almohadas, bolsitas para colgar alrededor de la casa para reducir la humedad y desodorizar el aire, y convertidos en fibras para mascaras faciales y bolsas para ir de compras para preservar la comida y la fruta. Además, Paiho Limited Co., una empresa contratista fabricante de equipos originales que ha estado trabajando con marcas internacionales de ropa deportiva durante muchos años, ha desarrollado hilo de bambú. Con patentes en ambos lados del Estrecho de Taiwan y en Estados Unidos, la compañía está lista para lanzar una serie de más de 20 productos, incluyendo chales, sombreros, y medias, que según la empresa, se ha comprobado que son más efectivas que otros productos en la preservación del calor.
Según Chen, Japón tomó la iniciativa al encontrar nuevos usos para el carbón, pero ahora no es el único país. “Comenzamos prestando sus herramientas y observando sus descubrimientos previos, pero tomando como base nuestro progreso en este punto, diría que estamos al mismo nivel tecnológico que ellos”, dice Chen.
Las plantaciones de bambú en Taiwan cubren un área total de 150.000 hectáreas, según COA. Entre las más de 100 especies que crecen en la isla, más de 40 son comúnmente vistas, mientras que seis se consideran valiosas desde el punto de vista económico. El bambú se madura en sólo cuatro años, cuando debe cortarse antes de que pierda su utilidad económica. Cuanto mejor mochado sea, mejor volverá a crecer; y cuanto mejor crezca, mejor contribuye a la conservación del agua y el suelo. Chen dice que las plantaciones de bambú de Taiwan son un recurso de suministro sinfín, con el rival potencial, y quizás final, de la industria electrónica de alta tecnología.
Animados por lo que pareciera un futuro prometedor, COA se imagina un ambiente más sólido ecológicamente facilitado por la tecnología del bambú.
La tecnología moderna está lista para cambiar la manera cómo la gente ve el bambú.
El proyecto bambú“Esperamos que con el tiempo, el bambú pueda desempeñar un papel en la conservación del agua y el suelo, y en la mejora de la ecología para la acuicultura y la industria de la ganadería”, dice Huang Miao-hsiu, jefe de sección del Buró de Silvicultura de Taiwan, que está promoviendo la substitución de madera por bambú donde sea posible. Taiwan ha prohibido la tala desde 1991, y ahora depende en gran parte de la madera importada. El bambú podría ofrecer una alternativa barata a esa dependencia, dice Huang.
Ella indica que ela programa de COA es sólo un comienzo, pero que es la acumulación de esfuerzos lo que ha superado las expectativas. El cálculo de un mercado con un valor de NT$100 millones (US$3 millones), esa cifra, dice Huang, parece ahora conservadora.
“Una vez más estamos impresionados por la dinámica de nuestras empresas pequeñas y medianas”, dice. “Nuestros fondos se dirigen solamente hacia la investigación de alto cauce, y luego ayudamos a transferir los resultantes avances tecnológicos a ellos. El resto tiene que depender enteramente de ellos, pero ellos no pierden tiempo desarrollando nuevos productos y construyendo canales de mercadeo”.
Pero el gerente de investigación y desarrollo de Paiho, Tony Tseng, cuya compañía ha trabajado con ITRI desde el pasado octubre, y fue el primero en emplear carbón de bambú en la producción industrial, dice que el programa de COA ha logrado hacer toda la diferencia.
“El programa ha ofrecido una dirección que con suerte nos diferenciará de China y Corea”, dice. “Hemos exhibido nuestros productos con hilo de bambú en Francia e Italia, y la reacción y el gran interés que muestran los clientes, nos hacen sentir muy positivos”. Tseng dice que la compañía también tiene planeado entrar en los mercados estadounidenses y europeos, y para ello, establecerá sus propias oficinas sucursales.
El proyecto bambú
Los investigadores taiwaneses están colocando la industria del bambú de Taiwan a la par de la de Japón.
Un criterio importante en mercadeo son los estándares, y para establecer un sistema de certificación estándar mundial para la nueva industria, los fabricantes locales han formado la Asociación para el Desarrollo de la Industria del Eco-carbón, que trabaja íntimamente con ITRI y COA.
“Una vez que el sistema de certificación esté en lugar, los miembros pueden solicitar un ‘pase’ para entrar en mercados nuevos, y tranquilizar la mente de los consumidores”, dice Chen, cuyo equipo asegura que los procesos de producción sean seguros desde el comienzo hasta el final, al supervisar y controlar el proceso de calentamiento con sensores computarizados instalados en los hornos.
El equipo está ahora experimentando con un sistema de calentamiento adicional, que tiene como objetivo elevar más rápidamente los niveles de calor en los hornos, para así acortar el tiempo que se necesita para producir carbón y fortalecer los efectos que el calor tiene sobre éste. En el laboratorio de ITRI, donde trabaja el equipo avanzado de calentamiento, continúan los experimentos que buscan convertir el bambú en oro. La carrera entre Taiwan y Japón sigue.
El proyecto bambú
La tecnología logrará abrir nuevos horizontes para los agricultores del bambú en Taiwan.
El lado flaco de Taiwan es el empaque, dice Huang.
“Los fabricantes necesitan tiempo para reconocer la importancia del empaque y el mercadeo”, dice, señalando que los pocos que hicieron caso al consejo de COA, y mejoraron su empaque, pudieron disfrutar de un aumento de hasta 100% de sus ventas. Para Huang, más agricultores necesitan hacer el cambio para que el bambú logre su promesa.
“Ya es tiempo de que la industria del bambú comience a notar el cambio a medida que la gente está más consciente de su ambiente”, dice.
Chen está de acuerdo, y dice que es sólo cuestión de tiempo antes de que explote la popularidad de los productos del bambú. “Antes, los agricultores nunca pensaron en hacer pasta dentífrica de sus cosechas”, dice. “Ahora apenas pueden satisfacer la demanda”.

Bambú
(Nota: puede ampliar las imagenes que llevan este símbolocan zoom)




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Mesilla de bambú para jofaina (Colección de Patrick Lee)
La belleza del bambú radica en las secciones fuertes, altas y majestuosas del tallo, así como su apariencia recta, lisa y elegante. Sus hojas se mecen con el viento, pero retienen su firmeza y bordes definidos. Aunque es hueco por dentro, posee nudos fuertes. Puede tolerar condiciones climáticas severas y permanecer verde durante todo el año. Más aún, su forma “erguida”, interior “desocupado” y nudos “restrictivos” lo han convertido en símbolo del caracter noble e integridad meritoria. Durante el Año Nuevo Lunar, la gente expresa deseos con la palabra bambú, tales como zhu bao ping an (竹報平安) (que las varillas de bambú anuncien que todo está bien) y bao zhu yi sheng chu jiu sui (爆竹一聲除舊歲) (el sonido de los petardos de bambú despide el año viejo). Otro dicho, qing mei zhu ma (青梅竹馬) (literalmente, ciruelos verdes y caballo de bambú), describe una amistad que data de la niñez.
La ubicación geográfica de Taiwan es ideal para el cultivo del bambú. Tanto los bambúes tropicales de rizomas pachimorfas (bambú gigante de Taiwan, bambú de Oldham, bambú espinoso y bambú de seto) como los bambúes de rizomas leptomorfas resistentes al frío (bambú moso, bambú Makino y la caña Kunishi) se cultivan en la isla. Existen variedades locales y extranjeras cuyos tamaños van desde el bambú enano de rayas blancas, de unos diez centímetros de altura, al bambú gigante, de 40 a 50 metros de altura. Los verdes y exuberantes bosques de bambú constituyen paisajes típicos de las aldeas campesinas en Taiwan. Muchos residentes de las urbes aprisionados por los edificios de cemento, acero y vidrio, aspiran por la tranquilidad de una “casa adornada con bambúes”.
story photo Taiwan posee ricos recursos de bambú. En el pasado, el bambú estaba íntimamente relacionado con la vida del pueblo: en los objetos de cestería y muebles, en el “dinero votivo” hecho de bambú que se quemaba como ofrenda para los dioses y espíritus, los bloques para adivinar o los andamios usados para la construcción de grandes edificios. Las investigaciones y promoción del cultivo del bambú por el Gobierno, así como las técnicas de procesamiento convirtieron los materiales y productos hechos con esta planta en importantes artesanías de exportación durante el rápido desarrollo económico de Taiwan. Por ejemplo, Taiwan fabricaba más del 90 por ciento de las reglas proporcionales usadas por los ingenieros en todo el mundo (su eje de unión triangular se hace con bambú). Hoy, la nueva tecnología, los materiales compuestos o las importaciones de productos de bambú, bejuco o madera de bajo costo han reemplazado la producción comercial del bambú en la isla. Sin embargo, en los campos artístico y cultural, la constante innovación ha mantenido la esencia tradicional de Taiwan mientras acuerpa la diversidad creativa, libertad y renovación, convirtiendo a la isla en un importante centro de la cultura del bambú en el mundo.
Antes de la llegada de los pioneros han para asentarse en Taiwan en el siglo XVII, los aborígenes que vivieron en la isla por muchas generaciones ya eran diestros artesanos del bambú y la madera; materiales con los que construyeron altares para honrar a sus antepasados, casas de reunión, habitaciones, graneros y torres de vigía. Las trampas para peces, contenedores, cestas para cargar en la espalda, cestos planos que servían de cedazo y para portar alimentos, corazas e impermeables eran en su mayoría hechos de bambú. El método de tejido en espiral es una forma artesanal característica de los pueblos de la familia lingüística austronesia. Instrumentos musicales de bambú, tales como caramillos, flautas y violines de arco son considerados como gemas de la música folklórica.

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Portavarillas y semilunas para adivinación hechos de bambú son comunes en los templos de Taiwan. (Colección de Patrick Lee)
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En el pasado, los funcionarios de alto rango, nobles, mercaderes y campesinos de Taiwan valoraban la importancia del conocimiento. Conocidos por su ávida apreciación de la literatura, los académicos también disfrutaban de la poesía, escritura, caligrafía y pintura, y ponían gran importancia al refinado deleite de la jardinería. Ellos usaban con frecuencia la palabra “bambú” como pseudónimo, o le ponían a sus residencias o estudios nombres tales como ladera de bambú, bosque de bambú, estudio de bambú, choza de bambú, veranda de bambú, ermita de bambú, y arroyo de bambú. En ambos costados de la pared trasera de la sala principal de una tradicional casa taiwanesa había con frecuencia coplas con la inscripción “Bambúes y pinos crecen en profusión”, una forma de expresar el deseo de la familia por prosperidad, estabilidad y piedad filial. Con frecuencia se sembraba un bosquecillo de bambúes al lado de la entrada para eliminar las vulgaridades e impartir elegancia y belleza a la casa. También se colocaba un plantío de pino, bambú y ciruelo para simbolizar su habilidad de resistencia como los “tres amigos del invierno”. Los viejos templos budistas en los bosques de bambú daban más importancia a la ubicación del bambú y las piedras, debido a que ellos simbolizan frescura, solemnidad y dignidad

El ciruelo, la orquídea, el crisantemo y el bambú son denominados los “Cuatro Caballeros”; el pino, el bambú, el ciruelo y la orquídea, los “Cuatro Amigos”; y el ciruelo, el bambú y la piedra, las “Tres Purezas y los Tres Beneficios”. Ellos fueron temas populares en las pinturas, así como el tallado para la pared, ventanas, puertas, puertas con reja y muebles. En los edificios tradicionales, es común encontrar paredes, vigas o postes pequeños entre serpenteantes corredores adornados con cerámica de esmalte verde con la forma del bambú. Las columnas de piedra están frecuentemente talladas con diseños de bambú, y las ventanas son hechas con diferentes formas de bambú. Tales expresiones ingeniosas reflejan un sincero aprecio por el bambú.
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En las ofrendas para longevidad durante los cumpleaños, un armazón de bambú cubierto con fideos reemplaza al sacrificio de un animal vivo. (Colección de Patrick Lee)
El bambú es usado para producir una sorprendente variedad de productos:
Materiales de escritorio: pinceles para escribir, armero para pinceles, cortinas de papel enrollado.
Intrumentos musicales tradicionales: flautas de bambú (tanto horizontales como verticales), caramillos, palmoteadores de bambú, castañuelas y mazos.
Juguetes: libélulas de bambú, pistolas de agua, cometas, zumbadores.
Artículos de uso personal: mondaoídos, rascadores de espalda.
Entretenimientos: Campanas para palomas, fichas para mahjong de bambú.
Instrumentos de labranza: sombreros de bambú, angarillas, yugos para el ganado, frenos de boca para ganado, diversos cestos de bambú, canastas para secar, recogedores de basura, cucharones, canastos para bananos, envolturas para brotes de arroz, baldes para regar y rastrillos de bambú.
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Pintura en tinta china de bambú, por Zheng Banqiao. (Colección del Museo Nacional del Palacio)
Equipos de pesca: cañas de pescar, trampas para peces, jaulas para peces y cestas para alevines.
Utensilios para el hogar: postes de bambú, escaleras de bambú, abánicos de bambú, escobas de bambú, cestas para carbón, baño María de bambú, coladores, coladores de arroz, cucharones para el arroz, palillos para comer, mondadientes de bambú, tenedores de bambú y bandejas para té.
Mobiliario: camas de bambú, mesas, sillas, alacenas, taburetes, palanquines, taburetes para niños y cunas de bambú.
Artículos ceremoniales o tradicionales: cestas para dinero espiritual, cestas para regalos, cestas para areca y cestas para fideos de arroz.
Artículos para matrimonios y festivales: canastos para triquitraques, cestas para casamenteras, tamices para arroz “doble felicidad”, abánicos plegables, faroles de apellido y faroles de “prosperidad ganadera”.
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Cestos para camarones hechos de bambú. (Colección de Patrick Lee)
Esos variados artículos no sólo son útiles para uso diario sino que también acuerpan una estrecha relación con la naturaleza y una gratitud al Cielo. Ellos también expresan un sentido especial de estética.
Desde una perspectiva artesanal, los muebles de bambú pueden ser clasificados como obras de bambú “toscas”, en oposición a las obras de bambú “finas” hechas con finas tiras de ese material. La habilidad para confeccionar muebles de bambú es única en los chinos han. Las destrezas especiales incluyen taladrar muescas en las secciones de bambú, calentar el bambú para doblarlo, insertar almillas, usar clavos y pernos de bambú. Cada parte de una pieza de mueble de bambú está firmemente conectada con las otras, convirtiéndolo en un mueble resistente.
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Este juego de sillones de bambú exhibe un acabado refinado y elegante diseño. (Colección de Patrick Lee)
El arte de bambú contemporáneo en Taiwan ha alcanzado grandes logros. Trabajando sobre la sólida base del arte de bambú tradicional, los artistas recolectan información, crean nuevas ideas y diseños, y desarrollan nuevas habilidades. Cuando escogen los materiales, ellos son más cuidadosos que en el pasado. Hoy, los artistas del bambú no sólo hacen algo por un propósito práctico, sino que también están creando obras con estilos personales para ser exhibidas en las galerías de arte.
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Incluso los bebés pueden apreciar la utilidad de la planta en este cochecito de bambú. (Colección de Patrick Lee)
La respuesta de los círculos académicos hacia las artesanías de bambú ha sido más entusiasta que nunca antes. Existe un creciente de número de académicos que investigan y escriben acerca de las artesanías. Generalmente hablando, los productos de bambú están disfrutando de un éxito mayor a medida que aparecen muchos artesanos que tejen productos de bambú. El nivel técnico de los artistas, así como los estilos de trabajo sobrepasan lejos a aquéllos de la dinastía Qing (manchú) o durante el período de la ocupación japonesa. Los colores y pinturas usados son más vívidos y más diversos.
El tallado en bambú no está limitado a las esculturas tradicionales y las coplas escritas en portapinceles, apoyabrazos y monturas para abánicos. Los artistas modernos son innovadores, no limitando sus diseños creativos a la larga forma del bambú. Gracias a los nuevos tipos de cuchillas y utensilios de tallado, los artistas pueden expresar sus ideas creativas más libremente cubriendo una amplia gama de temas relacionados con la literatura local, las costumbres folklóricas y la religión.
Un reciente desarrollo que es digno de mención son los objetos de cestería laqueada, que requieren de las destrezas de tejeduría en bambú y aplicación de capas de laca. Consecuentemente, resulta más difícil su confección y existen menos artistas que se dedican a este género. Los objetos de cestería laqueada han sido desarrollados recientemente y tienen muy mínimas restricciones tradicionales, permitiendo a los artistas expresar completamente sus ideas creativas. Los objetos de cestería laqueada han creado una nueva atmósfera en el arte del bambú en Taiwan.

DIAMANTE NEGRO DEL BAMBU VERDE

Chen Wen-chi, director del Departamento de Tecnología de Materiales Ecológicos, del ITRI, es un importante promotor de la industria del carbón de bambú en Taiwan. (Chang Su-ching)


La industria del carbón de bambú superó los tiempos difíciles después del Terremoto 921, y se ha convertido en una historia de éxito.
Una fresca tarde en mayo de este año, cinco turistas visitaron una tienda de artesanías en la Comunidad Sesqui en el Pueblo Wuchi, Distrito de Nantou, en el centro de Taiwan. A cada visitante se les sirvió té verde en dos tazas diferentes. Cuando el té se enfrió unos minutos después, lo tomaron. “Es increíble, pero el té en la taza de color negro tiene un sabor más agradable que el de la taza regular”, expresó sorprendida la visitante Lo Mei-wei. El sabor es más suave y la temperatura tibia. La diferencia de sabor también ocurre con el café y el vino.  ¿Qué tipo de taza mágica es ésta?
Según Liao Zhao-sheng, fundador de la Primera Aldea del Carbón de Bambú en Yuchi. “Las tazas pueden absorber el cloro y los olores del agua, haciendo la bebida más dulce y suave”.
Liao fue una de las primeras víctimas del Terremoto 921 ocurrido el 21 de septiembre en 1999 en el Distrito de Nantou. Cuando la tierra dejó de sacudirse, la casa y la finca de Liao quedaron destruidas. Sin embargo, a pesar de la devastación tras el desastre natural, Liao no se dio por vencido. “Esta crisis fue un punto decisivo para mí”, comenta Liao. “Sin el terremoto no hubiese descubierto el carbón de bambú, ni hubiese empezado una segunda carrera en mi vida”.
Liao cuenta que un amigo que acababa de volver de Japón le mostró por primera vez el carbón de bambú, y le sugirió que creara un negocio dedicado a hacer productos derivados. Como la zona de Yuchi produce una gran cantidad de bambú, adquirir la materia prima no fue un problema. Luego, buscó en Internet los institutos de investigación que podían brindar asistencia. Así logró contactar a Chen Wen-chi, uno de los principales impulsores de la industria del carbón de bambú en Taiwan, y actual director del  Departamento de Tecnología de Eco-materiales, del Centro para Tecnología de Filme Delgado y Nano Polvo, del Instituto de Investigación sobre Tecnología Industrial (ITRI, siglas en inglés). Con el asesoramiento técnico de Chen, Liao decidió incursionar en el negocio.
Hoy, después de años de ensayos y errores, perseverancia y arduo trabajo, la Primera Aldea del Carbón de Bambú se sitúa como una de las compañías más conocidas en la industria. Muchos visitantes que vienen a la fábrica de Liao son de Japón, donde al carbón de bambú se le llama el “diamante negro”. Los visitantes japoneses disfrutan al observar el proceso de hacer carbón de bambú, y a menudo hacen pedidos de los productos. En especial les impresiona la tecnología utilizada para producir las tazas. El alto nivel de interés en las tazas, tanto local como internacionalmente, se ha traducido en excelentes ganancias para la Primera Aldea del Carbón de Bambú, con NT$10 millones (US$300.000) en 2006.
DIAMANTE NEGRO DEL BAMBU VERDE-2Hierba alta
El bambú se cosecha para hacer carbón cuando tiene de 4 a 5 años. Luego se quemá a 600 grados Celsius o más. El bambú pertenece a la familia de las hierbas, cuando los tallos se cortan, la raíz seguirá echando retoños. La planta también es una fuente sostenible porque crece rápida y fácilmente.

(Chen Mei-ling)
El carbón puede hacerse de diferentes tipos de bambú. “En comparación con el carbón de bambú hecho de madera o el bambú que crece en otros lugares, el carbón de bambú de Taiwan es de mayor calidad porque la planta crece en las montañas altas sin el uso de pesticidas”, dice Chen, del ITRI. “Es golpeada por tifones todos los años, por eso su madera y el carbón resultante contienen más microporos. Esto equivale a mayor área de superficie, para que pueda absorber mejor partículas e impurezas que otros tipos de bambú”.
Las afirmaciones sobre los beneficios del carbón de bambú se han diseminado en la industria. El Boletín Informativo sobre Investigaciones Forestales publicado por el Instituto de Investigaciones Forestales de Taiwan, por ejemplo, señala que el carbón de bambú tiene la capacidad de absorber los olores de las viviendas, así como de refrigeradores; es capaz de absorber la humedad de las camas cuando se usa en artículos de lencería; puede absorber los gases tóxicos que están en el aire; y puede eliminar las toxinas del agua.
Estas aseveraciones han sido respaldadas por la investigación realizada por Liu Zheng-yu, profesor en el Departamento de Estudios Forestales en la Universidad Nacional Chung Hsing, en el centro de Taiwan, quien descubrió que después de la carbonización, el material exhibe una estructura única de poros que puede absorber los contaminantes y controlar la humedad. Las propiedades de absorción del carbón de bambú difieren según  la temperatura de la carbonización. Por ejemplo, el carbón de bambú puede absorber amoníaco y el compuesto orgánico trimetilamina cuando se carboniza a 500 grados Celsius; benceno y formaldehído de 900 a 1.000 grados Celsius; y componentes orgánicos, tales como indolita a 1.000 grados Celsius. La investigación realizada por Liu demostró también que cuando el entorno es más húmedo que el carbón de bambú, puede absorber la humedad del aire.
Algunos creen, aunque con menos evidencias, que el carbón de bambú tiene efectos de rayos infrarrojos lejanos, por lo que puede elevar la temperatura corporal y promover la circulación sanguínea; puede elevar el metabolismo, estimulando el crecimiento celular; y es capaz de liberar iones negativos en el aire. La investigación de Liu muestra que bajo ciertas condiciones, el carbón de bambú emitirá iones negativos, pero no concluye sobre el impacto de los iones negativos en la salud. Sin embargo, los entusiastas de este producto no tienen ningún reparo, y con frecuencia dicen que los iones negativos pueden mejorar el humor, aumentar el desempeño físico y esterilizar las bacterias dañinas del aire, y que demasiados iones positivos pueden causar ansiedad, dolor de cabeza y fatiga. Aunque los defensores de los consumidores en Taiwan han advertido que la mayor parte de la evidencia que respalda estas afirmaciones es informal, y se necesita más investigación, una gran parte del público acepta los supuestos beneficios para la salud, dando lugar a “una industria con un valor de más de NT$2.000 millones (US$61 millones) al año en Taiwan”, dice Chen, de ITRI.
Con raíces en Asia
DIAMANTE NEGRO DEL BAMBU VERDE-1El carbón de bambú tiene una larga historia en el Este asiático, donde el bambú crece en abundancia. La producción de carbón de bambú ha sido documentada ya desde 1486 durante la Dinastía Ming de China (1368-1644), cuando se utilizaba en gran medida como una fuente de combustible. Ha sido también usado en Japón para purificar el agua potable, reducir la humedad, eliminar olores y aliviar ciertos problemas de salud.
El bambú se encuentra en abundancia en Taiwan, donde crece rápida y fácilmente sin necesidad de fertilizantes o pesticidas. (Chen Mei-ling)
En Taiwan, se producía y se consumía poco carbón de bambú hasta después del Terremoto 921. Al principio, la industria sólo tenía el objetivo de crear un nuevo mercado para los cultivadores que ya existían y otros agricultores en las áreas del centro de Taiwan afectadas por el temblor. En 2002, el Consejo de Agricultura (COA, siglas en inglés), que se encuentra bajo la competencia del Yuan Ejecutivo, anunció el Proyecto para la Transformación y la Revitalización de la Industria del Bambú, para contribuir con los esfuerzos de reconstrucción tras el terremoto. En 2002, se estableció la primera base para la investigación en la Villa Sanwan en el Distrito de Miaoli, en el norte de Taiwan, con un grupo de investigadores compuesto por los miembros del Buró de Asuntos Forestales, de COA, el Instituto de Investigaciones Forestales de Taiwan y el ITRI, y equipos, tales como hornos. No obstante, la industria ha crecido rápidamente desde sus humildes comienzos, sirviendo de estímulo para los agricultores de bambú en Taiwan. Más importante aún, debido a las contribuciones de los fabricantes de carbón de bambú, los investigadores y el Gobierno, Taiwan es considerado actualmente uno de los líderes internacionales en este campo.
“Originalmente Japón superó a otros países en cuanto a tecnología para fabricar carbón de bambú”, dice Chen, de ITRI. “Por lo tanto, la gente de China continental y Corea del Sur quería invitar a Toba Akemi, quien es conocido en Japón como el maestro del carbón de bambú y considerado un tesoro nacional en el círculo de artesanos, para ayudarles a construir hornos en sus países. Toba no aceptó porque le preocupaba que los competidores se apropiaran del porcentaje que tiene Japón en los mercados internacionales. Pero en el caso de Taiwan, cuando él se dio cuenta que la gente le solicitaba asistencia en el desarrollo de la industria para ganarse la vida tras el sismo 921, finalmente aceptó transferir la tecnología que había desarrollado. Tomando como base sus consejos e investigación científica, se construyó el primer horno en 2002”, explica Chen. “Fue allí cuando la industria local del carbón de bambú vio los primeros rayos de esperanza”.
Fue durante la Expo 2005, una Feria Internacional celebrada en Aichi, Japón, que el carbón de bambú de Taiwan hizo su primer gran debut internacional. “Después que exhibidores taiwaneses mostraron sus productos y  logros en la Expo, que estaba dedicada a la apreciación y protección de la naturaleza, la comunidad internacional comenzó a apreciar los logros de Taiwan en el desarrollo  de estos productos ecológicos”, dice  Chen.
Tecnología sin igual
“Hemos progresado mucho desde 2002”, dice Chen. “Hasta ahora Taiwan ha desarrollado 112 productos diferentes fabricados con carbón de bambú, y realmente no tenemos competencia internacional en cuanto a nuestras tecnologías para hacer artículos, tales como sistemas de desalinización e hilo mezclado con nano fibras de carbón de bambú. Hasta el Maestro Toba, quien pensaba antes que Taiwan iba a ser un desierto para esta industria, admite ahora que se ha convertido en un oasis”.

DIAMANTE NEGRO DEL BAMBU VERDE-3Las compañías de cosméticos han comenzado también a utilizar el carbón de bambú. (Chen Mei-ling)
Según las estadísticas de COA, el número de fabricantes de carbón de bambú en Taiwan aumentó de solamente cuatro en 2003 a 13 en 2005, y a 18 en 2007. De estos, siete fabricantes recibieron la aprobación para llevar el logotipo de Estándares Agrícolas Certificados (CAS, siglas en inglés), un reconocimiento a las buenas prácticas de fabricación. Actualmente, los productos taiwaneses que incorporan carbón de bambú pertenecen a siete categorías: textiles (ropa interior, camisetas, bufandas, medias, forro de chaquetas, sombreros y lencería), materiales de construcción (pintura), alimentos (pasteles, repostería, pan y fideos), productos para la salud (protectores para cintura, rodillas y codos), productos para el medio ambiente (purificadores de aire y agua, y  fertilizantes), instrumentos musicales y dispositivos periféricos (alfombrilla para ratón). Para ayudar en la fabricación de estos productos, la industria ha desarrollado 12 tipos de maquinas industriales que producen y prueban el carbón de bambú.
Durante los últimos siete años, ITRI ha asistido la industria mediante el desarrollo y la transferencia de nuevas tecnologías. La demanda resultante de bambú ha sido una bendición para los agricultores locales. “El precio de un kilogramo de bambú era de NT$5 (US$0,15) en 2003 y aumentó a NT$10 (US$0,33) este año”, dice Chen.
Los fabricantes de productos de carbón de bambú se han beneficiado también del desarrollo de nuevas tecnologías de procesamiento. “El bambú puede procesarse y convertirse en productos de carbón activado que tiene usos tanto en las industrias tradicionales como de alta tecnología”, dice Chen. “El procesamiento eleva el valor de los productos del bambú a NT$500-$1.000 (US$15,25-$30,50) por kilogramo”.
Taiwan Peiho Ltd. es una de las  principales empresas involucradas en el desarrollo de la tecnología para hacer fibra de carbón de bambú. “Comenzamos a desarrollar nano fibras de carbón de bambú hace cinco años, cuando había solamente unas pocas compañías en el campo”, dice Vergel Cheng, presidente de Peiho.
Alrededor del mundo, la industria de textiles ha sido una de las principales beneficiarias de la nano tecnología, al mismo tiempo que ha aumentado el interés en las telas ecológicas. La nano tecnología puede usarse para hacer fibras que son en sí mismas de nano tamaño, o para crear nano revestimientos que pueden aplicarse a fibras naturales o sintéticas de tamaño normal. Asimismo, la nano fibra de carbón de bambú puede fabricarse agregando nano polvo de carbón de bambú durante el proceso para hilar las fibras de tamaño normal, o agregando carbón de bambú a los polímeros sintéticos. Sus aficionados afirman que la tela hecha con nano fibras de carbón de bambú puede absorber olores y humedad, mantener el calor y resistir el moho y los microbios.
“Los usos son muchos y variados”, dice Cheng. “A la gente le encantan nuestros productos, especialmente los fabricados con hilo de carbón de bambú  ‘de doble activación’, que pueden resistir la electricidad estática y las ondas electromagnéticas, junto con otras propiedades. Nuestra ropa deportiva y bolsas de dormir han recibido buena aceptación por parte de la gente que está expuesta a climas fríos como por ejemplo, los alpinistas”. Peiho trabaja estrechamente con ITRI en la investigación y desarrollo de nuevos productos. La línea de camisas, pantalones, ropa interior, chaquetas y bolsas de dormir produjo ingresos de NT$600 millones (US$18,22 millones) en 2008.
Otra compañía que trabaja con ITRI es TenShing Kiln, que produce cerámica hecha con carbón de bambú. Esta empresa fue construida originalmente en 1955, pero quedó destruida durante el Terremoto 921. Tras la reconstrucción, reabrió en 2000 para giras turísticas con el objetivo de mostrar sus hornos, impartir clases de cerámica y hacer exhibiciones de arte. El Yuan Ejecutivo reconoció los esfuerzos de TenShing, calificándola de “modelo de la reconstrucción tras el sismo 921”.

DIAMANTE NEGRO DEL BAMBU VERDE-4
Una exhibición de vinagre de carbón de bambú en la Primera Aldea del Carbón de Bambú. El vinagre se extrae cuando se hace el carbón de bambú. Se utiliza como un repelente contra zancudos. (Chang Su-ching)
“La materia prima de nuestra cerámica es una mezcla de arcilla natural con polvo de carbón de bambú de alta calidad”, dice Lin Qing-he, propietario de la tercera generación de TenShing Kiln. “Después de moldear la arcilla, se cuece a 1.220 grados Celsius. Los productos acabados de ‘cerámica con energía’ expiden radiación infrarroja, que activa y purifica el agua, y aumenta la salud celular”. Las botellas y envases “energéticos” fabricados por TenShing Kiln, enriquecen la bebida y ayudan a elevar la renovación celular.
A pesar de su popularidad, Taiwan enfrenta algunos retos. “En primer lugar, en comparación con otros países, el costo de producción es alto en Taiwan”, dice Yen Jen-teh, director general del Buró de Asuntos Forestales. “Por eso algunas compañías comprar el bambú en China continental, donde es más barato, aunque su calidad no está garantizada. Sin embargo, los productos hechos con bambú de Taiwan reciben un impulso de la tecnología, la promoción de la certificación CAS y las alianzas industriales estratégicas para crear productos distintivos”.
Mejora de la infraestructura
Yen cree que Taiwan necesita mejorar la infraestructura de la industria del carbón de bambú. Faltan instalaciones para producir y probar los productos, así como para acortar el tiempo de producción y elevar el nivel de la industria en general.
La investigación y desarrollo es también necesaria. Hasta ahora todos los productos de carbón de bambú son de color negro. Según Yen, hay que encontrar la manera de agregar color y otros elementos de diseño para hacer más versátil el producto.  Más profesionales en el campo deberían incorporarse a la industria, así como más coordinación entre las agencias gubernamentales e institutos de investigación para mejorar la escala de producción y promover la competitividad.
Aunque hay muchos retos que superar, los empresarios tienen confianza en que pueden salir hacia delante. Como dice Liao, de la Primera Aldea del Carbón de Bambú, “nuestra industria nació después del desastre provocado por el Terremoto 921. Ahora aprecio los momentos cuando estoy cociendo el bambú, porque cada pieza de carbón de bambú me recuerda la nueva oportunidad que me ha dado la vida”.



2 comentarios:

Anónimo dijo...

Es increìble saber los beneficios del bambu, gracias y los felicito. Estoy entusiasmado.

Jorge Batres dijo...

Me podrían enviar información sobre cursos que imparten con bambú a jorgebatres2002@yahoo.com.mx

Gracias

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