La Exposición Internacional de Flora organiza la Semana de Gratitud

La Exposición Internacional de Flora, Taipei 2010, luego de 171 días de exposición cerró sus puertas al público general el día 25 de abril, y a partir del día 26 hasta el 1° de mayo se llevará a cabo la Semana de Gratitud en honor a los trabajadores y voluntarios que contribuyeron al éxito de esta exhibición. El Comité de Organizadores ha entregado tres entradas a cada voluntario y trabajador para que en
compañía de su familia, los mismos puedan visitar los cuatro parques en donde se llevó a cabo la exposición y apreciar las hermosas flores, y de igual forma puedan recorrer los 14 pabellones en los cuatro parques. Uno de los 35 mil voluntarios que merece especial mención es Yeh Chong-Hong quien padece de cáncer en fase terminal y durante los últimos seis meses ha brindado sus servicios a la exhibición de una forma admirable.

En total se han repartido aproximadamente 300 mil entradas para ingresar en la exposición durante la Semana de Gratitud, y los 35 mil voluntarios provienen de diversos sectores de la sociedad; algunos son universitarios o alumnos de doctorados, hasta militares retirados provenientes de toda la isla de Taiwán. Entre el grupo de voluntarios, el más destacado es Yeh Chong-Hong, un paciente de cáncer en fase terminal quien ha pasado por 7 quimioterapias y 35 electroterapias, sin embargo no ha disminuído su actitud servicial y positiva de ayudar en el evento, como tampoco dejará de brindar su servicio como voluntario en la Semana de Gratitud. 

Yeh Chong-Hong dijo: “Mi vida es colorida porque he cumplido con lo último que debía hacer en la vida. La vida no es larga, y tal vez me queden solamente uno a dos años, pero no sé y no me importa, ya hice mis mayores esfuerzos. Ayer cuando escuché que el presidente de la Asociación Internacional de Productores de Horticultura dijera que la Expo Flora de Taiwán es el evento más exitoso de los últimos 50 años, me dio energía extra y me sentí inmensamente orgulloso”.

El voluntario Wang Sheng-Ching de 65 años también señaló que el trabajo como voluntario en este evento le dejó muchos aprendizajes a pesar de que fue un trabajo intenso y duro; ya que además de entablar nuevas amistades, ha aprendido cómo reaccionar ante situaciones de emergencia, y destacó que cada vez que un visitante le agradecía por su servicio, sentía en su corazón que el cansancio valía la pena.

RTI

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