Taipei, feb. 11 (CNA) El representante de Taiwan acreditado en Filipinas, Donald C.T. Lee, regresó a Taipei el viernes 11 después de que su Gobierno decidió llamarle de vuelta en protesta por lo que calificó como un "manejo inadecuado" del controversial caso de la deportación de 14 sospechosos de fraude de nacionalidad taiwanesa a China.
"Al igual que todo el pueblo de Taiwan, me siento sumamente descontento respecto a la deportación de los 14 ciudadanos taiwaneses a China por parte de las autoridades filipinas el 2 de febrero sin haber informado de antemano a la oficina representativa de nuestro país en Filipinas", dijo Lee a su llegada al Aeropuerto Internacional de Taoyuan, en el norte de Taiwan.
En horas más tarde de ese mismo día, Lee presentó ante altos funcionarios de la Cancillería y de otras agencias gubernamentales pertinentes un informe sobre las diferentes medidas adoptadas por la Oficina Económica y Cultural de Taipei en Manila para manejar el caso y acerca de las posibles evoluciones del incidente en el futuro.
En el curso de una conferencia de prensa convocada después de su reunión con el canciller Timothy C.T. Yang, Lee dijo que el primero de febrero, el Buró de Inmigración de Filipinas convocó una audiencia pública sin invitar a los abogados de los sospechosos taiwaneses ni a los funcionarios de la oficina representativa de Taiwan a participar en la misma.
Durante dicha audiencia, a la cual asistieron también representantes de China, las autoridades filipinas tomaron la decisión de deportar a los 14 sospechosos taiwaneses a China calificándolos como "indocumentados", puntualizó Lee, añadiendo que en realidad, sus respectivos pasaportes y objetos personales les habían sido confiscados previamente.
La deportación de los 14 sospechosos de nacionalidad taiwanesa junto con otros 10 cómplices chinos por parte del Buró de Inmigración de Filipinas a China provocó una fuerte protesta de parte de Taiwan ante las autoridades filipinas. Taiwan consideró la acción de Filipinas como un desaire a su posición respecto a tal caso.
Además, Taiwan anunció el 7 de febrero su decisión de llamar de vuelta a su representante acreditado en Manila, hacer más rígidas las regulaciones sobre la expedición de visados a los obreros filipinos que deseen trabajar en la isla y revocar el privilegio de la exención de visados para algunos visitantes filipinos como medidas punitivas contra ese país del Sudeste Asiático. Las autoridades competentes de Taiwan incluso han amenazado con implementar una segunda ola de medidas punitivas contra Filipinas en caso de que ese país del Sudeste Asiático no reconozca su irregularidad en el manejo de tal incidente.
Los 24 elementos ilegales fueron arrestados por un grupo ad hoc integrado por miembros del Buró Nacional de Investigaciones de Filipinas y las autoridades policíacas de China en el territorio filipino el 27 de diciembre pasado bajo la acusación de fraude transfronterizo concerniente a ciudadanos chinos.
Tras el arresto de todos los sospechosos de fraude, China les pidió repetidamente a las autoridades competentes filipinas que los deportaran a China de acuerdo con el tratado de extradición firmado entre los dos países, mientras que Taiwan, por su parte, insistió en que sus ciudadanos deberían ser repatriados a Taiwan bajo el principio de nacionalidad para ser sometidos a su justicia.
En otras noticias relacionadas, un informe enviado desde Manila indicó que el presidente filipino, Benigno Aquino III, había decidido enviar próximamente a un Enviado Especial a Taipei para darle al liderato de Taiwan una detallada explicación al respecto, después de la primera ola de medidas punitivas adoptadas por Taiwan.
Se espera que el nombre del Enviado Especial de Filipinas pueda ser dado a conocer la próxima semana, puntualizó el mismo informe, citando a fuentes allegadas a la Oficina Económica y Cultural de Manila, una oficina de enlace con Taiwan a falta de relaciones diplomáticas entre los dos países.(Por Chiu Chun-chin y Luis Huang)Enditem Share |
"Al igual que todo el pueblo de Taiwan, me siento sumamente descontento respecto a la deportación de los 14 ciudadanos taiwaneses a China por parte de las autoridades filipinas el 2 de febrero sin haber informado de antemano a la oficina representativa de nuestro país en Filipinas", dijo Lee a su llegada al Aeropuerto Internacional de Taoyuan, en el norte de Taiwan.
En horas más tarde de ese mismo día, Lee presentó ante altos funcionarios de la Cancillería y de otras agencias gubernamentales pertinentes un informe sobre las diferentes medidas adoptadas por la Oficina Económica y Cultural de Taipei en Manila para manejar el caso y acerca de las posibles evoluciones del incidente en el futuro.
En el curso de una conferencia de prensa convocada después de su reunión con el canciller Timothy C.T. Yang, Lee dijo que el primero de febrero, el Buró de Inmigración de Filipinas convocó una audiencia pública sin invitar a los abogados de los sospechosos taiwaneses ni a los funcionarios de la oficina representativa de Taiwan a participar en la misma.
Durante dicha audiencia, a la cual asistieron también representantes de China, las autoridades filipinas tomaron la decisión de deportar a los 14 sospechosos taiwaneses a China calificándolos como "indocumentados", puntualizó Lee, añadiendo que en realidad, sus respectivos pasaportes y objetos personales les habían sido confiscados previamente.
La deportación de los 14 sospechosos de nacionalidad taiwanesa junto con otros 10 cómplices chinos por parte del Buró de Inmigración de Filipinas a China provocó una fuerte protesta de parte de Taiwan ante las autoridades filipinas. Taiwan consideró la acción de Filipinas como un desaire a su posición respecto a tal caso.
Además, Taiwan anunció el 7 de febrero su decisión de llamar de vuelta a su representante acreditado en Manila, hacer más rígidas las regulaciones sobre la expedición de visados a los obreros filipinos que deseen trabajar en la isla y revocar el privilegio de la exención de visados para algunos visitantes filipinos como medidas punitivas contra ese país del Sudeste Asiático. Las autoridades competentes de Taiwan incluso han amenazado con implementar una segunda ola de medidas punitivas contra Filipinas en caso de que ese país del Sudeste Asiático no reconozca su irregularidad en el manejo de tal incidente.
Los 24 elementos ilegales fueron arrestados por un grupo ad hoc integrado por miembros del Buró Nacional de Investigaciones de Filipinas y las autoridades policíacas de China en el territorio filipino el 27 de diciembre pasado bajo la acusación de fraude transfronterizo concerniente a ciudadanos chinos.
Tras el arresto de todos los sospechosos de fraude, China les pidió repetidamente a las autoridades competentes filipinas que los deportaran a China de acuerdo con el tratado de extradición firmado entre los dos países, mientras que Taiwan, por su parte, insistió en que sus ciudadanos deberían ser repatriados a Taiwan bajo el principio de nacionalidad para ser sometidos a su justicia.
En otras noticias relacionadas, un informe enviado desde Manila indicó que el presidente filipino, Benigno Aquino III, había decidido enviar próximamente a un Enviado Especial a Taipei para darle al liderato de Taiwan una detallada explicación al respecto, después de la primera ola de medidas punitivas adoptadas por Taiwan.
Se espera que el nombre del Enviado Especial de Filipinas pueda ser dado a conocer la próxima semana, puntualizó el mismo informe, citando a fuentes allegadas a la Oficina Económica y Cultural de Manila, una oficina de enlace con Taiwan a falta de relaciones diplomáticas entre los dos países.(Por Chiu Chun-chin y Luis Huang)Enditem Share |
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