Ma se desplazó hasta las aldeas de Mituo, Zikuan, Kangshan y Renwu en el Condado de Kaohsiung, todas las cuales quedaron totalmente inundadas cuando el tifón Fanapi azotó Taiwan el 19 de septiembre con fuertes vientos huracanados y torrenciales lluvias.
En cada parada que hizo, el Primer Mandatario fue saludado por los residentes que lamentaron sus pérdidas y pidieron la ayuda del Gobierno. En la aldea Mituo, que es famosa por su industria de acuicultura, un criador de peces le dijo al Presidente que las torrenciales lluvias habían arruinado sus estanques.
En Kangshan, Ma visitó una pequeña fábrica de tornillos que también resultó gravemente afectada por las inundaciones. El propietario solicitó la ayuda del Gobierno, diciendo que su único sostén económico había quedado destruido por las inundaciones.
En su parada en la aldea Zikuan, el Mandatario vió las montañas de muebles y basuras amontonadas en las calles, y a los residentes ocupados en la limpieza de sus hogares.
Ma prometió pedir una evaluación profunda respecto a los problemas de drenaje que resultaron en las inundaciones en este condado en el sur de Taiwan para deslindar responsabilidades.
El Presidente dijo que muchos factores habían contribuido a las inundaciones, incluyendo el hecho de que una gran cantidad de lluvias había caído en un corto período de tiempo. Otros factores "deberán ser determinados por los profesionales técnicos", agregó Ma.
"Por el momento, no es tiempo de estar echando la culpa a ninguna persona por el desastre", dijo Ma, añadiendo que habría suficiente tiempo para determinar quíenes fueron los verdaderos responsables por las inundaciones.(Por Chen Chao-fu y Elisa Kao)ENDITEM
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