Ex Pdte. de Taiwan liberado temporalmente por funeral de suegra

Taipei, enero 6 (CNA) El encarcelado ex presidente de la República de China (Taiwan), Chen Shui-bian, cumplió el viernes 6 su obligación familiar para rendir su homenaje a su fallecida suegra en el sur del país, después de serle otorgado una liberación especial por parte de la Prisión de Taipei.

Escoltado por elementos policíacos de la prisión, Chen llegó a bordo de un mini bus a la ciudad de Tainan, en donde se celebró el funeral de la Sra. Wu Wang Hsia, quien falleció el 31 de diciembre del año pasado a la edad de 85 años.


Al bajar del bus, el ex presidente se arrodilló y empezó a arrastrarse por el suelo hasta el edificio del funeral siguiendo una costumbre tradicional. Chen no fue encadenado ni esposado en la ocasión.


En su traje elegíaco, Chen recordó conmovido que la última vez que vió a su suegra fue en junio del 2009, cuando asistió a una audiencia de la corte para testificar por sí mismo, describiéndose a sí mismo como "no filial" por no haberla podido ver antes de su fallecimiento debido a su encarcelamiento.


Chen también expresó su agradecimiento a su difunta suegra por haberle apoyado en su relación con su hija, Wu Shu-jen.


El ex presidente dijo que su esposa heredó el sentido de justicia y la "concientización de Taiwan" de su madre, por lo que siempre le apoyó a ir a la política.


En un aparente intento por limpiar la reputación de su esposa, que fue acusada y condenada por los tribulaes por el delito de corrupción, Chen dijo que su esposa no era una persona hambrienta de riquezas como creían algunas personas. También enfatizó que fue su esposa quien le aconsejó reducir a la mitad su salario, poco después de asumir su cargo en el año 2000.


El ex presidente dijo asimismo que no había hecho absolutamente nada que perjudicara a los taiwaneses o decepcionara a sus partidarios, pidiéndole al ramo judicial probar su inocencia y hacerle justicia.


Su discurso fue seguido por los gritos de "la justicia está muerta" y "A-bian es inocente" proferidos por un grupo de sus partidarios que se reunieron en el lugar para esperarlo.


Después de haberse quedado en el funeral por espacio de dos horas, Chen fue escoltado de vuelta a la cárcel.


Tanto Chen como su esposa fueron sentenciados por la corte suprema a 17,5 años de cárcel en diciembre del 2010 por haber recibido billonarios sobornos cuando era presidente.


A la ex primera dama, debido a sus precarias condiciones de salud que requiere de constante cuidado, se le postergó su encarcelamiento por tiempo indefinido después de que un hospital de la cárcel rechazó admitirla en febrero del 2011. Ella ha estado confinada a una silla de rueda desde que fue atropellada por un vehículo en la década de los 80. (Por Yang Sz-ruei y Elisa Kao)ENDITEM

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